
La espera terminó. Después de años de ausencia, Queensrÿche volvió a pisar suelo argentino y ofreció un show memorable en el Masters of Rock 2025, celebrado el sábado 26 de abril en Tecnópolis.
La banda estadounidense, pionera del metal progresivo de los años 80, subió al escenario pasadas las 16:40, desatando una verdadera celebración entre los fanáticos.
El show fue un viaje intenso por sus discos clásicos. La apertura con «Queen of the Reich» dejó en claro la intención de la banda: rendir homenaje a su era dorada con una ejecución impecable.
A lo largo de aproximadamente una hora, interpretaron gemas como:
«Walk in the Shadows»
«Operation: Mindcrime»
«Breaking the Silence»
«I Don’t Believe in Love»
«Take Hold of the Flame»
«Silent Lucidity» (momento emotivo de la noche)
«Empire»
«Eyes of a Stranger», que cerró su actuación en medio de una ovación ensordecedora.
Aunque esta fue la primera presentación de Queensrÿche en Argentina con Todd La Torre como vocalista —quien reemplaza a Geoff Tate desde 2012—, la esencia de la banda se mantuvo intacta. La Torre sorprendió a todos con su capacidad para alcanzar los registros agudos y dramáticos que caracterizan las composiciones clásicas de la banda, mostrando un respeto absoluto por el legado que ahora encarna.
Las guitarras de Mike Stone y Michael Wilton tejieron las armonías complejas y afiladas que definieron a Queensrÿche desde sus inicios, mientras que Eddie Jackson (bajo) y Casey Grillo (batería) sostuvieron un pulso demoledor, preciso y lleno de matices. La conexión con el público argentino fue inmediata y profunda. Cada coro, cada riff y cada silencio fueron compartidos en una comunión de respeto y admiración mutua.
Queensrÿche demostró que, a pesar de los cambios y del paso del tiempo, sigue siendo una máquina perfectamente aceitada de heavy metal progresivo, capaz de emocionar y de encender a varias generaciones de fans.
Fotos: Sofía Bravo













