
El sábado por la noche, el Teatro Vorterix se transformó en un motor encendido: allí rodó Tracción a Sangre XVII, la nueva parada de Camionero, el dúo integrado por Joan Manuel Pardo y Santiago Luis, que con cada concierto reafirma que su lenguaje musical ya es inconfundible.
Lejos de las etiquetas, Camionero volvió a demostrar que lo suyo es un viaje en constante reinvención. Con entradas agotadas, la multitud acompañó un setlist generoso —25 canciones— que abrió con Un poco más de consideración y enseguida desplegó un arsenal sonoro que alternó potencia y sutileza: Latas vacías, Esta noche y Confianza en ti solo marcaron el pulso de un comienzo sin concesiones.
El aire se volvió más denso con Preñado por el diablo y Cuero negro, hasta que la primera ovación explosiva llegó con Lo hago mal, me siento bien, donde apareció Gonzalo Varas, de Motochorros, para unirse en un cruce feroz que agitó al Vorterix entero.
En la mitad del show, el clima viró hacia lo introspectivo con Películas anónimas, Influjo y No hablaremos de mañana, para luego recuperar la velocidad con Agua asesina y Loop dorado. Canciones como Asesino del autocine y 999 calorías confirmaron que el dúo puede moverse en distintos registros sin perder su identidad rockera.
La recta final fue un torbellino: Trabajando para el capital (2040), Genio del Abasto, Guerrero atípico y Súbete a mi cama prepararon el terreno para el estallido definitivo con Mañana suburbana. El cierre dejó la sensación de haber asistido a un ritual más que a un simple concierto.
Camionero no viaja solo
Sobre y alrededor del escenario estuvieron El Acoplado —esa tropa de artistas, tatuadores, recicladoras textiles y creadores que amplían la experiencia— y la Rueda de auxilio, un conjunto solidario que vuelve cada show una fiesta comunitaria. En Vorterix, esa unión se sintió como un latido compartido, un recordatorio de que el rock también puede ser red, familia y celebración.
Tracción a Sangre XVII no fue solo una fecha más: fue la confirmación de que Camionero sigue escribiendo su propia ruta, a puro pulso, con canciones que se viven, se gritan y se festejan.
Las mejores fotos de Camionero en Vorterix

























































